2016年1月4日 星期一

神公義判斷的明證



帖撒羅尼迦後書第一章

 

神是公義的!在祂完美的屬性裡,慈愛與公義並存、聖潔與無私融合。

神是公義的!或者,也可以理解為公義本身就是慈愛,不是單向嚴苛的「是非審斷」,而是在愛裡有管教、在施行公義的過程中情願為罪人捨己犧牲。基督的捨命雖是白白的恩典,卻在這無與倫比的恩典中,有祂付出所期待的回報,那就是信者都應回應生命的規律,就是活現向罪死、向主活的樣式(羅馬書第六章)。

既然基督為挽回罪人,曾在十架上捨命,於是 神的公義向著罪人就有可判斷的明證:或者人願意聽從主耶穌基督的福音、在一切患難中信心增長、常常感謝、彼此相愛,或者,拒絕主耶穌基督的福音、違背 神的旨意,這兩種極端的反應,就成了 神公義的明證,判斷我們是屬基督的聖徒或者屬永世沈淪的悖逆之子。

你我平時生活的表現與態度,就是 神公義判斷的明證,祂雖信實,我們卻不能無信,只當存感恩的心,謹守自己的口,活出積極美好、順服聖經與聖靈的新生樣式,以回應祂公義的要求。因為,........祂是公義的 神!


何仁豪牧師
 

 

La prueba del juicio justo de Dios

2° Tesalonicenses Cap.1

¡Dios es justo! En su perfectos atributos, el amor y la justicia coexisten, la santidad y la sencillez se unen. 
¡Dios es justo! Podemos entender también que la justicia en sí es amor y no solamente un estricto "juicio del bien y el mal". Es también corrección en amor, en el proceso de ejercer la justicia estar dispuesto a sacrificarse por pecadores. Si bien Jesús dejó su vida sin pedir nada a cambio, en esta gracia incomparable hay una recompensa por su entrega, y es que quienes creen deben responder a la ley natural, que es morir al pecado y vivir como Cristo (Romanos 6).

Cristo para recuperar a los pecadores dejó su vida en la cruz, entonces la justicia de Dios hacia los pecadores tiene una prueba: las personas o desean obedecer el evangelio de Jesucristo y crecer en la fe en cada adversidad, agradecer en cada momento, amarse mutua mente, o rechazan su evangelio, dan la espalda a su voluntad. Estas dos reacciones extremas se convierten en la prueba de la justicia de Dios, determinando si pertenecemos en los discípulos de Cristo o en los hijos rebeldes que se pierden de generación a generación.

Vos y yo y las actitudes que mostramos en la vida cotidiana son pruebas del juicio justo de Dios. Si bien Él es fiel, no significa que podemos estar sin fe, debemos guardar un corazón de agradecimiento, cuidar mucho nuestra boca, vivir positivamente, vivir la nueva vida mediante la obediencia a biblia y el Espíritu Santo para responder a su exigencia de justicia, porque... ¡Él es Dios de justicia!

Pr. Felipe Ho