2016年2月10日 星期三

智慧的勸告



箴言第廿十四章1~22節

 

這幾篇箴言實在太美好了! 若我們能仔細思考,一定會發現它告訴我們一連串非常寶貴的勸告。作者已經不以對比及比喻的方式來說話,而是給予直接又清楚明瞭的勸告,指引我們如何活出一個健康並充滿上帝同在的生命. 我們若時常讀這本書,必會更加清楚自己當如何行、 如何生活、及該持守哪些正確的價值觀過日子。

本章的總結在第二十一節裡「 我兒,你要敬畏耶和華與君王,不要與反覆無常的人結交。」當以尋求上帝的旨意及同在,並稱謝祂為我們的首位。其次,務必遵守人的法律,服從執政掌權者。第三,要謹慎不與反覆無常的人結交,以免我們的中心被挪移,也就是,不要與不以上帝為主的人有太密切的關係,因為我們會受影響,且偏離上帝要我們走的路(新約很清楚告訴我們信與不信不可同負一軛)。

這節經文屬於那種我們不該忘掉的經文之一,應該貼在冰箱的門上的,或是做為我們電腦的螢幕桌面,或是把它裱框掛在家裡。若我們以此為生命目標,並盡力達成它,我們將活出一個完整、滿有上帝同在及屬靈(和生活其他層面)勝利的生命。但要活出這種人生是必須要全力投入,並務必將上帝作為我們一切的中心。你已預備好這麼做了嗎?

Flavio Calvo 牧師
 

 

Sabios consejos

Proverbios 24:1~22

¡Qué buenos son estos capítulos de Proverbios! Si lo pensamos, ahora nos está dando una serie de consejos que son valiosísimos. Ya no hace comparaciones, ya no habla con parábolas, ahora nos está brindando consejos directos y claros de cómo poder vivir una vida buena y llena de la presencia de Dios. Si leyéramos periódicamente este libro tendríamos mucho más en claro cómo actuar, cómo vivir, qué valores tener en cuenta para llevar adelante nuestras vidas.

El resumen de todo lo dicho esta vez está en el versículo 21 “Hijo mío, teme al SEÑOR y honra al rey, y no te juntes con los rebeldes”. Es importante buscar en primer lugar la voluntad de Dios, agradecerle a él y buscar su presencia. En segundo lugar cumplir con las leyes humanas, obedecer a quienes nos gobiernan. En tercer lugar cuidar de no juntarnos con personas que nos quiten del centro, no relacionarnos fuertemente con gente que no tiene a Dios como su Señor y que nos pueda tironear fuera de sus caminos. (El Nuevo Testamento es muy claro en no unirnos en “yugo desigual”).

Este versículo es, de esos versículos para no sacar de nuestras cabezas, debería estar pegado en la puerta de nuestra heladera, estar en el fondo de pantalla de nuestra computadora, estar en un cuadro en nuestras casas. Si tenemos esto como un objetivo de vida, si somos conscientes de este objetivo, vamos a vivir una vida plena, llena de Dios, y llena de triunfos espirituales, y de muchos otros tipos. Pero para vivirlo hay que jugarse, hay que estar decidido a hacer de Dios nuestro centro. ¿Estás dispuesto?

Pr. Flavio Calvo